Hay algunas cosas en la vida que podemos garantizar, y aparte de los impuestos, una de ellas es que el metal dentro de tu lavadora siempre terminará oxidándose. Como gran parte de este metal contiene hierro, eventualmente se oxidará, y este proceso se acelera debido a que las lavadoras usan agua y están húmedas. Esto puede afectar tanto a su lavado como a la máquina de dos maneras distintas:
- Las manchas de óxido dentro de la lavadora pueden rozar la ropa
- El óxido visible en el exterior puede indicar corrosión
El primer impacto es para su ropa, mientras que el segundo impacto es para la durabilidad y la salud a largo plazo de su lavadora. Mientras que las manchas interiores de óxido son bastante fáciles de eliminar, las manchas exteriores son más problemáticas.
Manchas Interiores
Una de las formas más sencillas y rentables de tratar las manchas de óxido dentro de la lavadora es usar vinagre o jugo de limón. Debido a los niveles de acidez dentro de estos armarios de cocina, son perfectamente adecuados para descomponer los compuestos de óxido de hierro que provocan la oxidación. No te vamos a aburrir con una lección de química, pero el jugo de limón y el vinagre pueden disolver los compuestos de hierro que contribuyen al proceso de oxidación.
Para deshacerse de esas manchas, simplemente vierta 2 tazas de jugo de limón en la máquina y complete un ciclo de lavado ( sin ropa ).
Si usa vinagre blanco destilado, agregue 2 tazas de vinagre blanco . Déjelo reposar durante una hora y luego ponga la máquina en un ciclo de lavado completo ( sin ropa ).
Si probó estos dos métodos y aún encuentra manchas de óxido en su ropa, es posible que el problema del óxido no solo se encuentre dentro de la lavadora, sino también en las tuberías. Esto es particularmente cierto en los hogares que utilizan tuberías de hierro galvanizado. Si hay óxido dentro de las tuberías que suministran agua a la máquina, deberá reemplazar las tuberías.
Manchas Exteriores
Si bien algunas manchas de óxido son puramente superficiales, otras son mucho más indicativas de óxido que se está extendiendo a las áreas circundantes. Esto puede ser un problema ya que, si no se trata, este óxido puede terminar dañando el metal que es vital para el funcionamiento de su lavadora.
Al igual que las manchas de óxido en un automóvil, puede seguir un proceso para eliminar estas manchas de óxido lijando, rellenando y cubriendo el óxido. Para hacer esto, necesitará los siguientes materiales:
- Tela/Trapos
- Bicarbonato de sodio
- Vinagre
- Disolvente de óxido
- Imprimador inhibidor de óxido
- Esmalte para electrodomésticos
- Relleno de carrocería para automóviles
- Espátula de plástico
- Papel de lija húmedo y seco de grano 150
Paso 1
Rocíe una solución de uno a uno de agua y vinagre sobre el área de óxido de la superficie, déjelo disolver el óxido durante cinco minutos y límpielo con un paño o un trapo. Como alternativa, puede frotar las manchas usando una mezcla de bicarbonato de sodio y agua .
Paso 2
Use su papel de lija húmedo y seco de grano 150 para lijar el óxido de cualquiera de los segmentos corroídos de la máquina. Cuando esto ya no sea efectivo, use un disolvente de óxido para limpiar los restos. Siga las instrucciones del producto y luego límpielo.
Paso 3
Ahora es el momento de rellenar las áreas que han sido erosionadas por el óxido. Tome su relleno de carrocería, mézclelo con el endurecedor y aplíquelo suavemente con la espátula de plástico. Para un acabado más suave, alíselo con su papel de lija antes de que fragüe.
Etapa 4
Use la imprimación inhibidora de la oxidación para preparar las áreas afectadas, antes de recubrirlas con esmalte que coincida con el color de su electrodoméstico. Asegúrese de consultar con el fabricante de su máquina para ver si puede proporcionar el esmalte exacto.
Quitar manchas de óxido de cromo
Al eliminar el óxido del cromo, el proceso es mucho más simple. Esto es lo que necesitas:
- paño seco o trapo
- Papel de aluminio
- cera para autos
Para eliminar las manchas de cromo, simplemente tome (o corte) un pequeño trozo de papel de aluminio, humedézcalo, estruje y frote el área afectada. Una vez que la superficie se haya alisado, simplemente tome un paño o un trapo y elimine los residuos de óxido. Para evitar que la zona se vuelva a oxidar, basta con aplicar un poco de cera para coches.
Solo asegúrese de eliminar cualquier mancha de óxido que vea en su lavadora ya que, si no se toca, el óxido se extenderá hasta que comience a afectar el funcionamiento de su máquina.
Si su máquina ya ha llegado a este punto, o no se siente cómodo realizando el mantenimiento anterior, necesitará una empresa de reparación para que venga y solucione el problema.